En este artículo cubro 2 cosas: primero cuál es el mejor pienso vegano para gatos, y seguidamente, para las personas más curiosas, los estudios y análisis que se han hecho para darle estas bolsas de comida a nuestras mascotas.
Así que, después de buscar mucho, este es el pienso vegano para gatos que considero mejor en relación calidad-precio.
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5 consideraciones el pienso vegano para gatos
Los gatos mandan en Internet. Y para muchas personas, también mandan en casa. Pero si eres vegano o vegetariano, o sólo intentas reducir tu ingesta de carne en general, puede suponer un desafío alimentar a estos pequeños carnívoros.
No sólo vale con tener un dispensador de comida para gatos y olvidarse de ellos. También nos tenemos que preocupar de que comen.
El sistema alimentario en el caso de las mascotas es igual de problemático que el nuestro. Es una industria basada en los costes bajos y los beneficios altos lo que, en el caso de los ingredientes animales, significa que la salud y el bienestar de un animal suele ser lo último.
Sin embargo, por suerte, no todas las empresas de comida para mascotas son iguales. Esto es lo que tienes que saber para ser el compañero más ético para un gato:
¿Qué comen los gatos?
El primer paso es aceptar que son carnívoros. Al contrario de lo que ocurre con los perros, que pueden sobrevivir (y desarrollarse) con una dieta vegetal, los gatos simplemente no podrán medrar sin carne.
No es una opción: se trata de supervivencia. No tienes más que echarles un vistazo: han nacido para cazar, como resulta evidente por sus garras y dientes afilados, y por sus sistemas digestivos pequeños. Y si eres un vegano que nunca tiene suficiente ternura en la vida, entonces tienes que aceptar que habrá carne en tu futuro.
El mejor alimento para gatos tiene un tamaño adecuado
Limítate a alimentar a tu gato con animales que podría (probablemente) matar por sí solo. No, no hay comida para gatos hecha de ratón, cucaracha o topo (todavía) pero, ¿podría matar tu gato a una vaca? Difícilmente.
Así que no le des carne de vaca. Dale a tu gato animales con un tamaño más cercano al suyo: pollo, pescado, o puede que incluso conejo. Esto no sólo es mejor para el sistema digestivo de tu gato, sino que también resulta de ayuda para evitar el ganado que genera más metano: vacas, ovejas y cerdos.
Es algo similar a lo que comentamos cuando hablábamos de las bolsas de pienso vegano para perros.
Opta por comida para mascotas sin cereales
Esto no es algo aconsejable para los humanos (la dieta paleolítica está de capa caída porque no es nada adecuada para las personas), pero resulta perfecto para los gatos.
Entre otras cosas, no deben comer donuts. Aunque algunos gatos son capaces de tolerar los cereales, muchos experimentarán pérdida de pelo, picor cutáneo, llagas, costras y eccemas, además de problemas digestivos. Si actualmente alimentas a tu felino con una dieta que incluye cereales sin ningún problema, entonces mantenla.
Pero si empiezan a producirse problemas como los mencionados, es posible que tu veterinario te recomiende eliminar los cereales durante un tiempo para ver si se solucionan.
Invierte en comida para gatos de calidad
Todas las marcas te dirán que su pienso vegano para gatos es el mejor. Pero es fácil investigar y encontrar los que tienen listas cortas de ingredientes, además de comprometerse a incluir alimentos naturales. Algunos productos puede que detallen sus fuentes, es decir, la procedencia de los animales usados en el pienso para gatos.
No tengas miedo de presionar a las empresas para que te proporcionen más información. Y definitivamente, no te ocupes por tu cuenta de la alimentación de tu gato a menos que lo hayas hablado con un veterinario.
Los gatos necesitan una dieta equilibrada, y alimentarlos simplemente con carne de pollo de corral orgánico no será suficiente. De hecho, si lo haces podrías estar predisponiendo a tu amigo peludo a que padezca algunas deficiencias y problemas de salud graves.
Así que opta por un pienso vegano para gatos adecuado para su edad y que tenga mayor cantidad de ingredientes de calidad. Y sí, esto te saldrá más caro que la comida comercial, pero piénsalo de esta forma: lo que gastas ahora en comida sana te ahorrará cuantiosas facturas del veterinario en el futuro (y probablemente añadirá años a la vida de tu gato).
Encuentra maneras de compensar el sacrificio de animales
Es difícil abrir esas latas de comida y luego preguntarte como un gato tan mono puede comer algo tan absolutamente asqueroso. Pero míralo así: si has rescatado un animal (¡gracias!), estás ayudando a lidiar con el enorme problema de la sobrepoblación de gatos. Dado que los humanos han perpetuado este problema, también es nuestra responsabilidad cuidar de las víctimas del sistema.
Así que, si sacrificar pollos o peces para dárselos a tu gato es desalentador, busca también formas de hacerte voluntario para ayudar a organizaciones o refugios comprometidos a ayudar a los animales que forman parte del sistema alimentario. Además, podrás contribuir manteniendo a los animales fuera de tu plato y optando por una dieta vegana.
Si no sabes si comprar pienso vegano para gatos
Miles de veganos tienen animales de compañía, o cuidan de gatos rescatados. Sin embargo, lo que debería darles de comer un vegano sigue siendo un polémico asunto de debate. Andrew Knight, un veterinario especialista en ética, legislación y ciencia del bienestar animal, y profesor de Ética y Bienestar Animal en la Universidad de Winchester, nos cuenta más sobre este tema.
Cuando se llevan a sus conclusiones lógicas, las percepciones comunes erróneas sobre la dieta de los animales de compañía nos pueden conducir a lugares notablemente interesantes. Por ejemplo, podemos extrapolar del ‘saber popular’ que hay un temible depredador que acecha tanto en la superficie como en las profundidades del océano.
Increíblemente fuerte, parece que este monstruo se adentra nadando 15-30 kilómetros mar adentro, donde se enfrenta a atunes rojos (que pueden pesar hasta media tonelada) en batallas a muerte bajo el agua.
Aunque alguna vez caza especies más pequeñas, como el salmón, los boquerones y las gambas, parece tener una predilección por los atunes, y nunca se ha sabido que perdiera una batalla. Aunque resulte inquietante, este monstruo también es increíblemente feo.
Está cubierto por completo de pelo, que tiene un aspecto espantoso cuando está mojado, y el agua transforma a esta extraña bestia hidrofóbica en una maraña de garras que sisea y escupe. Esta horrible aparición es, por supuesto, un gato doméstico.
Depredadores terrestres
Y en África, ni siquiera están seguros quienes están en tierra. Según el ‘saber popular’ sobre la dieta de los felinos, también es posible que haya colonias en expansión de felinos salvajes que han vuelto a sus métodos tradicionales, a su juego de acechar y cazar, sobre todo vacas, ovejas y cerdos, llegando a amenazar a las manadas de búfalos en peligro de extinción.
A estos temibles depredadores felinos aparentemente les gusta devorar a sus presas tragándolas con la ayuda de leche de vaca. Por lo visto, los gatitos adquieren de forma natural el gusto por la leche porque sus madres los dejan con vacas lactantes seleccionadas para cuidarlos, mientras salen a cazar…
«¡Completamente ridículo!» ¿Te he oído burlarte? ¡Piénsalo mejor! Millones de cuidadores de gatos en todo el mundo consideran algo completamente natural alimentar a sus compañeros felinos y caninos con pescado y gambas en lata, además de partes de los cuerpos de vacas, ovejas, cerdos, pavos, patos y pollos.
Forma parte del ‘saber popular’ que los gatos comen de forma natural dichos animales, y que los gatos beben leche de vaca. Porque no cabe ninguna duda de que millones de cuidadores experimentados de mascotas no pueden estar equivocados, ¿verdad?
En una fascinante muestra de lógica, muchas de esas mismas personas consideran que las dietas veganas para animales de compañía sólo pueden ser ‘antinaturales’. A algunos les preocupa la mala situación de los animales que se usan como alimentos, y la pesada carga medioambiental que inflige el sector ganadero.
Sin embargo, también les preocupa que las dietas veganas puedan privar a sus compañeros animales de nutrientes esenciales.
Como veterinario de mascotas con un interés especial en la salud y en los problemas nutricionales relacionados con las dietas veganas para animales de compañía, he rastreado la literatura científica en busca de estudios que describan sus efectos adversos.
Y por raro que parezca, teniendo en cuenta la fuerza del ‘saber popular’ sobre este tema, me ha resultado difícil encontrar evidencias científicas que demuestren que los gatos alimentados con dietas veganas nutritivas y bien pensadas estén menos sanos de lo normal. Pese a ello, sí que he encontrado otro tipo de evidencia.
Por accidente, encontré más de diez estudios publicados que documentan los ingredientes peligrosos usados en las dietas basadas en carne comercial, o los efectos negativos para la salud que producen en los gatos que se alimentan con esos productos.
Dietas basadas en carne: algunas verdades desagradables
Las enfermedades que se ha demostrado que son más probables al alimentar a largo plazo a los gatos con ciertas dietas basadas en carne comercial incluyen las de riñón, hígado, corazón, tiroides, las neurológicas y neuromusculares, las de la piel, las enfermedades infecciosas y los trastornos hemorrágicos.
Además, después de examinar y tratar a miles de animales durante alrededor de una década, estoy convencido de que las tasas de enfermedades como el cáncer y los trastornos renales y hepáticos son mucho mayores de lo que sería natural.
Este tipo de trastornos son especialmente habituales en mis pacientes más mayores, en los cuales pueden llegar a producir enfermedades graves y, desgraciadamente, a necesitar que los sacrifiquen.
Si estos animales fueron expuestos durante muchos años a toxinas no lo bastante graves como para provocar reacciones agudas, pero sí lo suficiente como para producir daño celular, los descritos serían exactamente el tipo de efectos que cabría esperar.
Y especialmente si esas toxinas se incluyeran como parte de la dieta. El primer órgano importante expuesto a dichas toxinas después de su ingestión y su absorción intestinal sería el hígado, que tiene la responsabilidad de convertirlas en moléculas aptas para la excreción que viajan a través el torrente sanguíneo.
Y los riñones son los mayores responsables de dicha excreción. De esta manera, tanto las células hepáticas como las renales estarían muy expuestas a estas toxinas, y correrían un mayor riesgo de resultar dañadas. Sin embargo, las toxinas transportadas por el torrente sanguíneo también podrían dañar otras células a lo largo del cuerpo, y un daño celular a largo plazo podría predisponer al cáncer.
Ahora bien, ¿hay toxinas en las dietas habituales de los animales? Mis investigaciones han puesto de manifiesto que cuando se importan de regiones como EEUU, que tienen regulaciones más laxas, los alimentos comerciales para mascotas constituyen un vasto vertedero industrial para los productos de desecho de los mataderos, la carne de animales muertos, moribundos, enfermos o discapacitados, la carne antigua o estropeada de los supermercados, grandes cantidades de carne procesada gatos procedentes de refugios de animales, y grasa usada de restaurantes.
Dicho vertedero industrial contiene elevadas concentraciones de peligrosos radicales libres y ácidos grasos trans. También puede contener pescado estropeado o podrido, el cual posee niveles potencialmente peligrosos de mercurio, PCBs y otras toxinas.
El resultado de todo ello acaba siendo irresistible para muchos gatos mediante la adición de una sopa de intestinos, hígados, pulmones y diversas vísceras parcialmente disueltas procedentes de pollos y otros animales.
Todo esto se puede evitar dando de comer a tu mascota pienso vegano para gatos.
Dietas veganas para animales de compañía
Por lo tanto, no resulta nada sorprendente la existencia de multitud de casos que ponen de manifiesto que la transición de los animales a dietas veganas saludables con pienso vegano para gatos puede dar como resultado un aumento de la salud y la vitalidad general.
Además de menores incidencias de cáncer, infecciones, hipotiroidismo (una enfermedad hormonal), ectoparásitos (pulgas, garrapatas, piojos y ácaros), un mejor estado del pelaje, un mayor control de las alergias y del peso, y menores problemas de artritis, así como el retroceso de la diabetes e incluso la curación de las cataratas.
Además, hay una cantidad limitada de estudios más rigurosos que examinan la salud de las poblaciones de mascotas alimentadas a largo plazo con pienso vegano para gatos. Un estudio publicado en 2006 y realizado entre otros por L. A. Wakefield comparó la salud de 34 gatos alimentados con dietas vegetarianas durante al menos un año, con la de 52 gatos alimentados con dietas basadas en carne durante por lo menos un año.
Pues bien, no hubo diferencias significativas en cuanto a edad, sexo, condición física, vivienda o estado de salud percibido, y a la mayoría de los gatos se los describió como sanos o generalmente sanos.
Por otro lado, otro estudio de 2009 realizado entre otros por W. Y. Brown, analizó a 12 huskies siberianos que participaban en carreras.
A la mitad de los perros se les alimentó con una dieta comercial recomendada para perros activos, y a la otra mitad con una dieta sin carne formulada según las mismas especificaciones de nutrientes.
Estas dietas supusieron su única ingesta de nutrientes durante 16 semanas, lo que incluyó 10 semanas de competición en carreras. Se realizaron pruebas y análisis de sangre veterinarios. Pues bien, todos los perros se mantuvieron en una excelente condición física, mostrando unos resultados normales de sus análisis de sangre a lo largo de todo el estudio.
Estos resultados no son ninguna sorpresa si tenemos en cuenta que los animales necesitan nutrientes específicos, no ingredientes específicos.
No hay ninguna razón científica por la que no se pueda formular una dieta compuesta únicamente de ingredientes vegetales, minerales y sintéticos que cumpla todas las necesidades de las especies a las que se dirige en cuanto a palatabilidad, nutrición y biodisponibilidad.
De hecho, hay disponible comercialmente pienso vegano para gatos que tiene ese mismo objetivo. Estos productos han permitido alimentar a miles de gatos, perros y hurones (que también son carnívoros por naturaleza) sanos durante muchos años a menos que necesiten carritos.
Sin embargo, para evitar deficiencias nutricionales que terminen produciendo enfermedades, resulta fundamental recurrir a una dieta comercial nutricionalmente completa y razonablemente equilibrada, o bien a un suplemento nutricional que se añada a una dieta casera. Por otro lado, los cambios en la dieta deberían producirse de forma gradual.
Además, aconsejo comprobar regularmente la acidez de la orina mediante tiras de análisis de pH (las pueden proporcionar los veterinarios, aunque también son fáciles de comprar online), o incluso con medidores de pH más precisos.
Esto se debe a que las dietas veganas pueden dar como resultado una orina más alcalina, lo que puede provocar cálculos renales y obstrucciones graves en una pequeña proporción de los animales, sobre todo gatos machos. Además, debería seguirse seriamente cualquier consejo sobre control de la orina y, si fuera necesario, sobre aditivos dietéticos que puedan corregir la alcalinización de la orina.
Así que recuerda: los gatos, los perros y los hurones necesitan nutrientes específicos, no ingredientes específicos.
Avisos sobre comida vegetariana para gatos
La doctora Lew Olson, autora del libro “Raw and natural nutrition for dogs” (“Nutrición cruda y natural para perros”), hace esta analogía: “intentar alimentar a un gato con una dieta vegana sería como dar de comer carne a mis caballos. Estás cogiendo a una especie animal y forzándola a comer algo que no está preparada para asimilar.”
“En el caso de los gatos, es realmente inadecuado. Va contra su fisiología y es algo que no recomendaría en absoluto”, afirma Cailin Heinze, nutricionista veterinaria colegiada y profesora auxiliar de nutrición en la Escuela de Medicina Veterinaria Cummings de la Universidad de Tufts (Massachusetts).
«En el caso de los perros no cabe duda de que pueden seguirse dietas vegetarianas y veganas, pero hay que plantearlas con muchísimo cuidado. Es muy fácil cometer un error, y probablemente estas dietas no son tan adecuadas como las que contienen por lo menos algo de proteína animal”, afirma Heinze.