Si estás haciendo reformas en tu casa o has estado pensando en sustituir la calefacción de gas antes de que lleguen los meses más fríos, merece la pena que te plantees las ventajas de cambiar al uso de radiadores eléctricos.
Es posible que nunca antes hayas pensado en este tipo de calefacción.
El motivo es que, tradicionalmente, la calefacción eléctrica se refería a esos radiadores portátiles de hace décadas que se podían enchufar en una toma de corriente.
También tenían un aspecto poco atractivo.
Sin embargo, si echas un vistazo a la amplia variedad de productos disponibles a día de hoy, está claro que ha habido tremendos avances en cuanto a calefacción eléctrica a lo largo de los años.
De esta forma, en la actualidad es posible encontrar radiadores eléctricos energéticamente eficientes, elegantes y con diseños modernos que se pueden instalar de forma sencilla en las paredes de tu casa.
De hecho, cada vez más personas eligen este tipo de calefacción al decidir entre radiadores eléctricos vs gas natural, ya que ofrece una notable eficiencia a la hora de calentar estancias.
Además, en muchos casos sale más barata que la anticuada calefacción de gas.
Así que a continuación te explicaré los motivos por los que ha llegado la hora de subirse al tren de los radiadores eléctricos, y por qué deberías optar por la electricidad cuando dudes entre calefacción eléctrica vs gas.
Índice de contenido (navegable)
- 1 A la calefacción eléctrica no le afectan las averías de la caldera
- 2 El sonido del silencio
- 3 No tendrás gastos de fontanería ni de mantenimiento
- 4 Las calderas antiguas son ineficientes
- 5 No tendrás problemas de fugas
- 6 No perderás calor por las tuberías
- 7 Los radiadores eléctricos ayudan al medio ambiente
- 8 También podrás ahorrar dinero
A la calefacción eléctrica no le afectan las averías de la caldera
No debes olvidarte de que las calefacciones de gas funcionan con una caldera. Ésta debe calentarse hasta cierta temperatura para que el agua pueda meterse en los radiadores, lo que a su vez hace que se calienten.
Sin embargo, los radiadores eléctricos no necesitan utilizar una caldera.
Por lo tanto, si la misma se rompe, no correrás el riesgo de que tu casa no esté caliente y cómoda.
Es probable que ya hayas experimentado la rotura de una caldera. Pero si no es así, ¡considérate afortunado! ¿Sabías que el 18% de los hogares han experimentado averías de calderas durante el último año?
Si hubiera sido tu caso, sabrías el frío que se puede pasar sin calefacción. Sin embargo, usando radiadores eléctricos no te quedarás sin calefacción.
Así que en este claro, parece clara la solución a la disyuntiva entre radiadores eléctricos de pared vs gas natural.
El sonido del silencio
Otra cosa a tener en cuenta es el ruido que produce una calefacción de gas. Mucha gente se despierta durante los meses de invierno con el ruido de los radiadores de gas.
Me refiero a ese molesto burbujeo y golpeteo del agua a medida que la caldera y los radiadores empiezan a calentarse.
La gran ventaja de los radiadores eléctricos es el silencio.
No hay ruido de fondo, ni chasquidos, ni ningún golpeteo a lo largo de las tuberías situadas debajo del suelo. Y eso también supone que podrás dormir mejor.
No tendrás gastos de fontanería ni de mantenimiento
No hay ninguna duda de que instalar una calefacción de gas requiere de un profesional. Y tampoco te olvides de que una caldera necesita un mantenimiento anual (con un coste de entre 50 y 150 euros).
Además, tanto las tuberías como los radiadores son propensos a las fugas.
Estos problemas no sólo tienen un impacto en la eficiencia de la calefacción, sino que las reparaciones pueden llegar a ser costosas.
Pues bien, una de las mayores ventajas de la electricidad en la comparación calefacción eléctrica vs gas, es que los radiadores eléctricos no requieren mantenimiento, ya que se alimentan mediante una toma de corriente.
Por lo tanto, ni tendrás que mantenerlos, ni llamar a ningún fontanero, ni tampoco deberás purgarlos.
Las calderas antiguas son ineficientes
Si todavía no has reemplazado tu vieja caldera, es muy posible que estés usando un sistema de calefacción ineficiente.
Cuanto más vieja sea tu caldera, más le costará calentar tu casa.
Además, si no mantienes correctamente tu caldera, correrás el riesgo de que se estropee. Y cuanto más grave sea la avería, más caro será repararla.
Las calderas deben ser sustituidas una vez cada 15 años, y el coste medio va desde los 2500 euros hasta más de 5000 euros, dependiendo del tamaño de la caldera que necesites para tu casa.
También deberás tener en cuenta el coste del seguro, que rondaría los 100 euros anuales. Por supuesto, seguirás necesitando una caldera para el agua caliente.
Sin embargo, usando radiadores eléctricos nunca te quedarás sin calefacción y no necesitarás un caldera tan grande (lo que te ahorrará dinero).
No tendrás problemas de fugas
Los costes de mantenimiento de una calefacción de gas también afectan a los radiadores. Cuando revientan o tienen fugas, es probable que tengas que comprar otros nuevos.
Su coste es muy parecido al de los radiadores eléctricos. Sin embargo, debes tener en cuenta que no hay ninguna garantía de que no vayan a tener fugas, y tendrás que pagar a un fontanero para que los instale.
Esto es algo muy importante a la hora de decidir entre radiadores eléctricos de pared vs gas natural. Por contra, los radiadores eléctricos los podrás instalar tú mismo.
Además, recuerda que tendrás que purgar regularmente los radiadores, lo que a veces requiere de un fontanero. Sin embargo, ¡no será necesario que purgues los radiadores eléctricos!
No perderás calor por las tuberías
Como dije, con un sistema de calefacción de gas, el agua caliente viaja por las tuberías hasta los radiadores.
Durante ese trayecto, se pierde buena parte del calor, sobre todo si las tuberías no están aisladas.
En ese caso, seguro que no sabrás que hasta el 50% del calor se pierde de camino a los radiadores.
Por ese motivo, tendrás que calentar tu casa durante más tiempo, y muchas veces también deberás subir la potencia por culpa de esas costosas pérdidas de calor.
Sin embargo, usando radiadores eléctricos no tendrás un sistema de calefacción que dependa de tuberías. Y si tienes que sustituir tu calefacción de gas, será mucho más rápido y sencillo optar por usar radiadores eléctricos en su lugar.
De hecho, ¡es tan fácil que puedes hacerlo tú mismo! Así que no tendrás que llamar a una empresa de fontanería, que a menudo tienen unos precios exagerados por realizar visitas a domicilio y por la mano de obra.
Esto es algo que deberás tener muy presente al decidir entre radiadores eléctricos vs gas natural.
Los radiadores eléctricos ayudan al medio ambiente
Merece la pena mencionar que los radiadores eléctricos son infinitamente más ecológicos que la calefacción de gas.
No tienen emisiones, por lo que son limpios además de silenciosos.
No existe riesgo de envenenamiento por monóxido de carbono, ni tampoco se emite dióxido de carbono.
De esta forma, se preservan los recursos naturales porque se minimiza el consumo de leña y de combustibles fósiles.
Así que al instalar lo último en cuanto a radiadores eléctricos, estarás protegiendo el mundo en el que vivimos.
También podrás ahorrar dinero
Así que la gran pregunta es la siguiente: ¿qué sale más barato en la comparación calefacción eléctrica vs gas? Bueno, a primera vista el gas parece la opción más barata.
Una unidad de gas cuesta 4 céntimos por kWh, mientras que una unidad de electricidad cuesta 15 céntimos por kWh. Por lo tanto, el gas es tres veces más barato.
Pero no caigas en la trampa de asumir que eso significa que es la opción más barata de las dos. Al menos no lo es necesariamente.
En primer lugar, como dije, debes pensar que es poco probable que tu caldera de gas tenga una eficiencia del 100%.
Estas calderas pierden calor al calentar los radiadores debido a las fugas que se producen a lo largo de las tuberías.
Un radiador eléctrico convierte 1 kWh en una unidad de calor.
Las calderas no consiguen esto, ya que sólo tienen una eficiencia de un 90% (cuando están nuevas) que se va reduciendo a medida que envejece.
De esta forma, es posible que una caldera antigua sólo tenga una eficiencia del 50%, o menos si no se mantiene cada año (algo que no es necesario en el caso de los radiadores eléctricos).
Así que ahí lo tienes. Existen muchos motivos por los que la electricidad sale ganadora en la comparación entre radiadores eléctricos de pared vs gas natural.
En resumen, no tendrás que realizar una cara instalación de tuberías, ni llamar al fontanero, ni realizar un mantenimiento, ni oirás ningún ruido, ni tampoco correrás el riesgo de sufrir envenenamiento por monóxido de carbono.